La vida pasa,
y pesa,
dejando huella,
marcando ritmos,
vitales y finales,
dejándonos
huérfanos de amor,
buscadores de alegría,
plumas mojadas
incapaces de escribir
una sola línea más.
La vida pasa,
por nosotros,
y nos vive
con el sabor
agridulce
del que sabe
que se irá
ahora
que ha llegado.
La vida pasa,
enmascarada,
mientras se distrae
viéndonos jugar
a descubrir
su verdadero rostro.
Ilusos nosotros
que creemos
descubrirla
en los momentos
intensos
de nuestra
tragicomedia.
La vida pasa,
entre nuestros dedos,
y no podemos
atraparla,
salvo con un beso.
Nunca una ausencia,
como es la vida,
tuvo tanta fuerza
para mantenernos
inmersos
en su vorágine.
La vida pasa,
y yo no sé
si la contemplo
o es ella
quien me mira,
sentada en su sofá,
comentando
con sus amigas
cada uno de mis tropiezos.
Quizá les divierta ver
que empiezo nuevo camino,
con más lugares
donde tropezar,
o quizá lloren por mí
ahora que tú no estás.
La vida, al pasar,
ResponderEliminarlas vueltas que da
la vida, al pasar...
Vivir no es sólo existir,
ResponderEliminarsino existir y crear,
saber gozar y sufrir
y no dormir sin soñar.
Descansar, es empezar a morir.
Gregorio Marañón